OLEAJE DE SIGLOS
Ancla la tarde su miseria
bajo el alcándara de los dioses
el tiempo nos devora cual cadáveres dulces
-Siempre hemos sido presa fácil para el olvido-
Pero el mar...
patrimonio que se ahoga en nuestra sangre
nos devuelve la cercanía con lo que fuimos
Somos, desde siempre, ese oleaje de siglos
la ciudad se hundió sin esperarnos
LA POESÍA AL FÍN NOMBRA
Este verbo que al fin nombra
trae consigo su propio misterio:
soledad
asombro
destrucción...
Una luz a punto de conjugarse
...en esta brevedad infinita
lunes, 23 de junio de 2008
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